¿Te has enamorado? ¿Te han roto el corazón? La verdad, creo que son dos sentimientos más similares de lo que la gente cree. Un sentimiento desgarrador, increíble y superior a las fuerzas de cualquier ser humano.
El enamoramiento, hace explotar tu mundo, hace que sientas fuego dentro, que se te salga el corazón cuando esa persona te escribe, cuando llega ese mensaje que tanto deseabas.
Pero se acaba, llega la ruptura y te encuentras con la dura y cruda realidad, que el fuego que sentías dentro era provocado por tu corazón, consumido por esa explosión que el amor provoca.
Me gusta pensar que el amor es el fuego y el desamor la ceniza, son causa y consecuencia, préstamo y deuda, principio y fin. Dos sentimientos que toda persona ha de vivir al menos una vez, para aprender lo que es el amor. El sentimiento más fuerte que puede sentir una persona, el más feliz y el que más llena; pero que como he dicho con anterioridad, es a su vez el que más vacío deja, el más duro y el que más cuesta soportar.
Yo escribiendo esto, siento que no quiero vivir del pasado, pero pasado el tiempo la echo de menos, a esa persona que incendió mi interior, que hizo explotar mis sentimientos.
Se lo que digo, causa dolor, no es masoquismo, es el amor, es ese sentimiento de libertad y de felicidad. El dolor es la consecuencia y cada uno es libre de aceptarlo o de rechazarlo. Yo extraño los besos, las caricias y el cariño que el amor trae consigo.
Pero el pasado es eso, pasado, pretérito como dicen en las escuelas. Hay muchas formas de afrontarlo y actuar en consecuencia de él, algunos lo llaman arrepentimiento, yo prefiero aprendizaje.
Al fin y al cabo, en el colegio ya nos decían que la mejor forma de mejorar era aprender de los errores.
J.